Durante la semana
del 21 al 26 de Mayo he tenido la oportunidad de vivir una experiencia
magnífica gracias a obtener una de las movilidades que el programa Erasmus +
Escolar ofrece a los docentes para que continúen mejorando su formación. He realizado un curso de formación de francés
para profesores en Lyon Bleu Internacional, una escuela con alumnos
internacionales localizada en Lyon, una ciudad en la región histórica
Ródano-Alpes en Francia, cuyo centro histórico refleja dos mil años de
historia.
No era la primera
vez que estaba en Lyon, pero si la que más he podido andar por sus calles y
observar su belleza, el reloj me marca un total de 86 km recorridos andando
durante estos seis días de viaje descubriendo cada uno de los barrios,
monumentos, traboules…
El centro de Lyon
rodeado de sus dos ríos, la Saona y el Rhon, tiene un encanto especial. La
Basílica Notre-Dame de Fourvière, le vieux Lyon, la croix rousse o le parc de
la tête d’or son algunos de los sitios más bonitos que he visitado.
Durante esta semana
he estado con una familia de acogida con la que he tenido la oportunidad de
practicar un lenguaje más familiar y conocer las diferencias en la cultura de
cada país.
Durante el curso de
formación para profesores que tenía de 9:00 a 15:15 he tenido la oportunidad de
conocer a otros docentes con los que poder entablar futuros proyectos en común
y también a muchos estudiantes, que venidos de todas las partes del mundo
apuestan por el aprendizaje de idiomas como herramienta para abrirse las
puertas a los diferentes países de Europa. He conocido a estudiantes que huyen
de sus países por los conflictos armados, otros que saben que su país no va a
poder ofrecerles un futuro de calidad, y otros que se lanzan a la aventura para
vivir desde muy jóvenes experiencias inolvidables. Todos ellos con la
motivación de mejorar sus condiciones de vida y abrirse a un mundo donde el
aprendizaje de idiomas es esencial para poder prosperar profesional y
personalmente.
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